La radiación solar es el factor desencadenante más importante en la aparición de manchas de origen melánico.
Sin embargo, hay otros factores como la edad, la genética, los cambios hormonales, la exposición a factores ambientales agresivos o incluso los medicamentos.
Entre las manchas cutáneas, las más comunes son:
Melasma
Son manchas marrones, son irregulares de origen hormonal que pueden ser potenciadas por la exposición al sol.
Lentigos solares o seniles
Son la combinación entre envejecimiento cutáneo y exposición al sol, lo cual provoca que estas manchas tengan una coloración diversa.
Efélides
Son las clásicas pecas de origen congénito, que aumentan con la edad y cuando nos exponemos al sol son mucho más visibles.
HPI (Hiperpigmentaciones Post Inflamatorias)
Es un problema inflamatorio, por ejemplo después del acné, también después de la depilación o incluso de un golpe o de una cicatriz.
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