El equilibrio de nuestra piel depende de tres factores clave:
- El manto hidro-lipídico
- La microbiota
- El pH
Manto hidro-lipídico
Es una emulsión natural que recubre la superficie cutánea. Está compuesto por agua (del tejido, del ambiente y de los cosméticos) y aceite (segregado por nuestras glándulas sebáceas).
Es clave para que el agua y el aceite estén presentes de forma equilibrada.
Microbiota
Es el ecosistema de microorganismos que residen en nuestra piel. Su función es asegurar que esté protegida, ayudándola a defenderse de las agresiones externas.
El equilibrio de esta flora cutánea es imprescindible para una piel saludable y bonita.
pH
Es una medida de acidez de una solución. La piel tiene el pH ligeramente ácido que evita la proliferación de microorganismos nocivos.
Es importante mantener los niveles de pH naturales para mantener la función protectora que le aporta a la piel.
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